Dios no tiene favoritos
¿Alguna vez has pensado que Dios tiene sus preferidos en este mundo y que tú no estás incluido en ese grupo? Es cierto, vivimos en un planeta de tantos nepotismos, amiguismos y enchufes que a veces llegamos a pensar que el propio Dios se conduce bajo tales paradigmas. Es difícil pensar que un joven que ha crecido en un hogar de escasos recursos y en medio de circunstancias aparentemente desventajosas pueda tener un futuro promisorio. Pero ahí es donde entra el factor de la fe, el cual puede modificar cualquier escenario, por adverso que parezca.